Campaña Antártica de Verano 2016/17

Las bases serán abastecidas por primera vez con buques y aviones propios

La República Argentina en la Campaña Antártica de Verano (CAV 2016/17) que se inicia próximamente, reabastecerá las trece Bases Antárticas, seis permanentes y siete temporarias, durante la CAV utilizando embarcaciones y aviones propios y se descartó la contratación de un buque polar, recurso que se utilizó desde el incendio del Rompehielos ARA Almirante Irizar (Q-4) en año 2007.

La decisión de cancelar la licitación para el alquiler de buques para la Campaña Antártica de Verano (CAV) fue tomada por el Ministerio de Defensa, estableciendo de esta forma un diseño logístico y presupuestario de una campaña con medios propios, que representará un ahorro del 40% aproximadamente.

La planificación de esta CAV prevé cubrir la logística con buques y aviones propios, a excepción de la base Belgrano II para la que ya se buscan cotizaciones por el servicio de aerolanzamiento y transporte de personal, teniendo previsto cumplir con todos los requerimientos de insumos y materiales que deben abastecer las bases, y también garantizar los despliegues de todas las misiones científicas que fueron planificadas.

Los buques logísticos de la Armada Argentina tendrán la responsabilidad de transportar gran parte de los tambores de combustibles y cargas generales que durante la última década fueron transportados por buques alquilados.

El Ministerio de Defensa, para el logro de estos objetivos, aprobó un refuerzo presupuestario destinado a aumentar la cantidad de días de navegación de los transportes ARA Puerto Deseado, ARA Canal de Beagle (B3) y ARA San Blas (B4) de los que el primero tendrá la responsabilidad de trasladar todas las cargas hasta el puerto fueguino de Ushuaia, mientras que el segundo partirá desde allí para abastecer a las bases antárticas.

Además, tres de los navíos rusos tipo Neftegaz incorporados a fines de 2015 se sumarán a las tareas de transporte mientras que un tercero de la misma clase se mantendrá alistado para cubrir eventualidades.

Base Belgrano II

La Base Belgrano II, la más austral de las bases argentinas, será abastecida por un sistema de aerolanzamientos, por el que el Ministerio de Defensa ya comenzó a solicitar cotizaciones a nivel internacional; aunque con este método no podrán retirarse los contenedores de residuos que estaban previstos replegar con un rompehielos alquilado.

El año pasado los integrantes de la Dotación que se encuentra actualmente en la Base Belgrano II partieron hacia la Antártida desde la plataforma del Aeropuerto de Ushuaia, provincia de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, a bordo del gigantesco avión de transporte ruso Ilyushin Il-76, alquilado por el Gobierno Nacional.

Esta aeronave se encargo del traslado del personal hasta el glaciar Unión en el Continente Antártico, luego de recorrer unos 2800 km, desde allí se embarcaron en otro avión especialmente adaptado, un Basler BT-67, que es un DC-3 modernizado y con motores turbohélice, que voló a la pista de hielo que se encuentra a unos 1000 km de distancia y a unos 8 km de la Base General Belgrano II.

Base Marambio

La Fuerza Aérea Argentina dispondrá de tres aviones Hércules C-130, que harán los "puentes aéreos" entre Ushuaia y Marambio; un avión Twin Otter y dos helicópteros el Mil Mi-171E y el Bell 212.

La Base Marambio, la más grande de las bases argentinas, será abastecida por un puente aéreo a cargo del Escuadrón I, Hércules C-130 de la Fuerza Aérea, que deberá trasladar hasta allí 3256 tambores de gasoil antártico para abastecer generadores (aproximadamente 650.000 litros), cerca de 600 de combustible aeronáutico JP1 (aproximadamente 120.000 litros), 50 de diversos lubricantes y otros 300 metros cúbicos de materiales que representan 193 toneladas de peso.

Para esto, el escuadrón de Hércules y su grupo mecánico del Escuadrón Técnico, trasladarán su asiento de manera temporal a la Base Aérea Militar Río Gallegos, dónde operarán el puente aéreo desde el mes de diciembre con tres aviones y se estima que en el transcurso de la CAV se sume un cuarto que, en estos momentos, está siendo modernizado en la Fábrica Argentina de Aviones (FAdeA) de la provincia de Córdoba.

A las 700 horas de vuelo que estaban previstas originalmente para la CAV, este puente aéreo le agrega otras 390 con un costo cercano a los 82 millones de pesos.

GESTIONES REALIZADAS

El presupuesto inicial de esta campaña era de 1.200 millones de pesos, se estima que con estás medidas se va a poder costearla con cerca de 900 millones.

En la licitación que el Ministerio de Defensa había lanzado para sostener las 13 bases que hay en la Antártida Argentina se habían presentado cuatro ofertas para el alquiler de un rompehielos y un buque polar para el transporte de todo el combustible y los materiales necesarios.

El alquiler de un buque polar que se efectuó en los últimos años, en esta oportunidad las autoridades de la Armada Argentina y del ministerio de Defensa había añadido el de un rompehielos, para poder abastecer por mar y resolver necesidades logísticas de la base más austral de nuestro país, Belgrano II, ubicada del otro lado del Mar de Weddell.

La licitación internacional planteaba la necesidad de contar con un buque polar con dos helicópteros propios para operar entre 75 y 85 días y con un rompehielos que opere entre 15 y 20; a esas tareas se les estimó un costo de 20 millones de dólares; presentando ofertas cuatro empresas, las que fueron rechazadas por una comisión técnica.

Es muy importante el desarrollo de esta Campaña Antártica de Verano, porque es el inicio del cumplimiento de varios programas anuales de gestión y política antártica del nuestro país, desarrollados por la Dirección Nacional del Antártico, que pueden consultar haciendo clic AQUÍ

Mientras tanto, el rompehielos ARA Almirante Irízar (Q-5) está listo para iniciar las pruebas de mar, pero no puede salir a navegar de su lugar de amarre, en el muelle de Tandanor, debido a que la profundidad del río allí no alcanza para sacarlo del dique y continúa demorado el dragado del canal que lo tiene encallado. Ver AQUÍ